Vamos a pensar en el principio de 2016 cuando el mundo se estaba preparando para los esperados lanzamientos de buques insignia de Samsung en el MWC. Estábamos salivando y no podíamos contener el fervor que emanaba de nuestras costuras colectivas. Saltábamos a cualquier mención de un dispositivo de Samsung en cualquier lugar del omnipresente y omnisciente Internet.
Así que, ¿Dónde está ese entusiasmo por el Galaxy S8? Está claro, que sentimos cierta sensación de impaciencia, pero ¿es equiparable a la del año pasado? Además, ¿Dónde está el hambre por lanzamientos de otros smartphones al comienzo de este año? Parece que la impaciencia que rodea a los smartphones no es tan alta como lo era años atrás.
Sólo nos queda preguntarnos si esta caída en el entusiasmo se debe a Samsung o a que el mundo está perdiendo el interés en los smartphones. ¿Habrá llegado esta tecnología a su cúspide? Bueno, teniendo en cuenta las ventas, no. Están llegando más fabricantes al mercado y más gente tiene acceso a dispositivos (especialmente en el ecosistema de Android). ¿Pero solucionan las ventas el problema? Quiero decir, las ventas de tostadoras siguen estando bastante bien, pero nadie pone mucho empeño al escribir sobre ellas.
¿Se están convirtiendo los smartphones en otra tostadora en la historia de la tecnología? No de momento, seguimos teniendo mucho entusiasmo por los lanzamientos y nuevas características. Y en realidad no hay ningún otro producto de consumo de la misma categoría que haya tomado su lugar, ningún horno microondas va a robarle el protagonismo. Hasta que llegue el momento y se nos presente algo nuevo y brillante, probablemente saltaremos ante cualquier mención de alguna nueva característica embarcando en un dispositivo insignia. La pregunta es si 2016 fue la cúspide. No lo sabremos hasta después de la MWC de 2017, pero desde luego ahora mismo lo parece. ¿Pero de verdad hay que echarle la culpa a Samsung?
Las ventas de Samsung siguen siendo fuertes incluso tras la debacle del Galaxy Note 7. La última vez que Samsung estaba en peligro de perder su posición como número uno como fabricante de Android fue en 2014. Podría haber algo de cansancio con Samsung tras el problema del Note 7 aunque y quizás algunas personas mantienen la cautela hasta que el S8 salga a la venta durante algún tiempo y se hayan subsanado los problemas potenciales.
Es un punto esencial para Samsung y para Android en general. Google se ha acercado más a Apple con el Google Pixel. Es hora de que Samsung elija. ¿Seguirá el mismo camino que Google o creará un camino distinto?
Soy un fuerte defensor de que Samsung permanezca fiel a sus raíces y ‘regrese al futuro’ con sus nuevos modelos – volver a la batería desmontable, etc. Si quieres un comunicado que cree revuelo, intenta con un Samsung Galaxy S8 de plástico. Eso hará que el mundo hable. Además de cualquier nueva característica increíble, probablemente estamos ante un Galaxy S7 mejorado, lo que no es muy emocionante.
¿Así que de verdad hay que culpar a Samsung por el descenso en el entusiasmo que rodea a los smartphones del 2017? Creo que, al menos en parte, sí. Y al ser el líder mundial en la fabricación de Smartphones, es cosa de Samsung el girar las tornas y usar su gran departamento de investigación para darnos nuevos dispositivos que no estén pasados.
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