Apple presentó sus nuevos smartphones de gama alta, el iPhone 14. Si bien la mayoría de las mejoras propuestas representan una evolución menor en comparación con el iPhone 13, una característica de esta nueva generación de dispositivos podría transformar el panorama de la telefonía móvil.
A pesar de las afirmaciones de Apple, el iPhone 14, iPhone 14 Plus, iPhone 14 Pro y iPhone 14 Pro Max todavía no son una revolución en el campo de la telefonía. Incluso se rumorea que cambiar al chip A16 Bionic traería una ganancia de rendimiento bastante insignificante en comparación con la generación anterior. Si, iOS 16 trae su cuota de novedades, en general, Apple se ha conformado con modificar una línea de productos que parece destinada a evolucionar poco a poco.
Las personas que vieron el discurso de apertura de Apple habrán notado un cambio importante: ¡La tarjeta SIM desaparecerá! En los Estados Unidos primero, pero no hay duda de que esta revolución llegará rápidamente a todo el mundo. Los usuarios de iPhone 14 abandonarán efectivamente la tarjeta SIM, y esta tendencia, después de una fase clásica de rechazo por parte del público y otros fabricantes, probablemente se extenderá a todos los smartphones
iPhone 14 y el adiós de la SIM
Abandonar la tarjeta SIM, el conector para auriculares o incluso usar el puerto Lightning. Apple es bien conocida por abandonar los estándares tecnológicos para imponer los suyos. A primera vista, las demás marcas se burlan de las decisiones unilaterales y perturbadoras de la empresa de Cupertino, como lo demuestra el video de Samsung burlándose del último iPhone 14. Sin embargo, tarde o temprano siguen la tendencia dictada por Apple.
Apple ha decidido que la tarjeta SIM llegó a su fin. No hay duda de que la competencia también abandonará el chip antiguo. La tarjeta eSIM tiene innegables ventajas para los operadores de telefonía, fabricantes de smartphones (ahorro de espacio), pero también para los clientes, que ya no necesitan pasar por su operadora para cambiar el chip.
Esta facilidad de uso sigue siendo teórica por el momento, dista mucho de ser uniforme la experiencia y resulta muy diferente de un sistema operativo a otro, incluso de un dispositivo a otro. Sin embargo, para el consumidor promedio, el cambio general significa que será más fácil y rápido cambiar de operador.
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