Huawei no podrá comercializar su Mate 30 con una licencia de Android. El equipo probablemente se lanzará bajo AOSP y, por lo tanto, sin las aplicaciones y servicios de Google, incluida Play Store. Así hagan su mejor esfuerzo Harmony OS no estaría listo para la fecha de lanzamiento del Mate 30.
Huawei no tiene derecho a comercializar su futuro Mate 30 con una licencia de Android y, por lo tanto, las aplicaciones y servicios de Google asociados, incluida Play Store. La información fue confirmada por un ejecutivo de Huawei y un portavoz de Google. Huawei recientemente recibió 90 días adicionales para trabajar con sus proveedores estadounidenses después de las sanciones administrativas de Trump en su contra, pero esto solo se aplica a los productos que el grupo ya ha lanzado. Por lo tanto, los nuevos dispositivos como el Mate 30 serán afectados porque Huawei aún esta en la lista negra.
Huawei Mate 30: sin licencia de Android y sin aplicaciones de Google
130 compañías han solicitado una licencia con el Departamento de Comercio de los Estados Unidos para obtener permiso para continuar trabajando con Huawei. Ninguno habría sido aceptado. «Huawei continuará utilizando el sistema operativo y el ecosistema de Android si el gobierno de EE. UU. Nos lo permite», dijo Joe Kelly, portavoz del grupo chino. «Si no, continuaremos desarrollando nuestro propio sistema operativo y ecosistema», dice.
El problema
Huawei no esperaba reemplazar Android en sus smartphones y su sistema operativo doméstico Harmony OS todavía no parece estar totalmente listo. Harmony es multiplataforma y se puede adaptar a smartphones, pero por ahora el desarrollo se concentra para televisores, relojes y pulseras, así como para la automatización del hogar.
Es probable que para el Mate 30, que está programado para el 19 de setiembre del 2019 (la fecha podría variar), Huawei se vea obligado a usar AOSP, la versión de código abierto de Android sin los servicios de Google. Esto necesariamente tendría un impacto en las ventas. Así también el SoC Kirin 990 que se presentó el 6 de setiembre de 2019: se basa en la tecnología británica ARM, una compañía contratada por empresas estadounidenses y, por lo tanto, en teoría no puede colaborar con Huawei.
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