La Inteligencia Artificial es, sin duda alguna, un tema de conversación muy interesante, no sólo por sus beneficios sino también por los problemas que su uso puede darle a la humanidad en el corto, mediano y largo plazo; y la Inteligencia Artificial es incluso más compleja que el fuego o la electricidad, según Sundar Pichai, CEO de Google.
El futuro es ahora
Más allá de lo que pueda decir Sundar Pichai, es imposible negar que el 2017 fue el año de la Inteligencia Artificial. Nació Bixby (Samsung) y tanto Alexa (Amazon) como Google Assistant (Google) se establecieron en muchos productos.
Como ya hemos mencionado en muchas ocasiones, este 2018 será el año en el que la Inteligencia Artificial, mediante asistentes virtuales, se establecerá no como una tendencia sino, tal vez, como una necesidad.
Pensando en el pasado CES 2018, tenemos que reconocer que casi todas las marcas implementaron, de una forma u otra, algo de Inteligencia Artificial, pensando justamente en que todo, y todos, debemos estar conectados.
Precios elevados
Ahora mismo la Inteligencia Artificial funciona, pero sólo hasta cierto punto. Finalmente, los asistentes virtuales tendrán que estar presentes en todos nuestros dispositivos tecnológicos para que la Inteligencia Artificial funcione al cien por ciento.
Ahora bien, estar conectados con nuestros smartphones, televisores, refrigeradores, sistemas de aire acondicionado, autos y robots aspiradores no es nada barato, pero es un precio que tendremos que pagar/invertir tarde o temprano.
La seguridad es importante
Pichai indica:
«La Inteligencia Artificial es uno de los temas más importantes en los que el ser humano está trabajando actualmente, y es justo preocuparse por ello. Necesitamos preocuparnos por la información que le damos a los asistentes virtuales, ya que ellos aprenden de nosotros, y no al revés».
Siempre debe existir el balance
“Así como el fuego se usa para buenos fines, también puede matar gente. Tenemos que aprender a controlar el fuego para beneficio de la humanidad, pero también tenemos que superar sus desventajas”.
Al final del día, todo es balance; y ese balance no sólo depende de Google, sino que depende de todos los usuarios. Estamos todos juntos en la búsqueda de ese balance que nos lleve a mejorar nuestras vidas, y si la Inteligencia Artificial es parte de ello, pues bienvenido sea.
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